La neurología cada día ha cobrado mayor fuerza en la educación infantil. Gracias a investigaciones en este campo, el maestro está en capacidad de comprender el desarrollo evolutivo del niño, brindarle ayuda en el momento apropiado y ofrecer una educación personalizada.
1. ¿Cómo se entiende el neurodesarrollo en el proceso educativo?
El neurodesarrollo nos abrió un camino sobre la forma de enseñar y de mirar el aprendizaje. Cuando el maestro conoce acerca de las funciones cerebrales, le es posible ofrecer una pedagogía más flexible y comprensiva, brindar a cada niño lo que necesita. A partir de ahí, acepta la diversidad y la diferencia.
2. ¿Cuándo empieza el desarrollo neurológico?
El crecimiento y desarrollo humano es una continuidad de interacciones entre el potencial genético y el medio ambiente, y se inicia en la gestación, y aún más, podríamos decir, desde antes de nacer. De aquí la importancia de prepararnos para ser padres y responsabilizarnos aún antes de fecundar, porque solo podríamos modificar, eliminar o controlar factores de riesgo.
3. ¿Qué papel juegan los padres de familia y los docentes en el proceso de aprendizaje?
Los padres son los primeros y principales educadores de sus hijos, son los que lo introducen en ese mundo social y cultural en que vive, los que enriquecen en mayor o menor grado su ambiente natural, los que le permiten una identificación, un lugar en la familia y en la sociedad, por ello, la forma como han soñado e idealizado a ese hijo, el grupo cultural al que pertenecen y la madurez que han adquirido como familia, influirá en la forma como ese hijo mirará el mundo y el camino que escogerá para lograr su realización personal. El docente es un guía, un mediador del aprendizaje del niño, lo cual lo compromete a conocer de pedagogía, a conocer a sus alumnos y a las familias de éstos, y a ser conciente de la importancia de realizar ejercicios de reflexión sobre su quehacer práctico.
4. ¿Por qué es tan importante el juego en el desarrollo de potencialidades y talentos?
El juego es una acción seria para los niños. Durante su juego, el niño se muestra concentrado en lo que hace, puede reír, llorar, hablar, moverse, hacer como si…fuera un hada, una mamá, un papá, un héroe…, puede entender situaciones, roles y expresar sentimientos y emociones. Un juego le permite al niño retos, resolución de problemas, entender su entorno. Ver a un niño jugar, es poder apreciar su desarrollo en todas las dimensiones, es poder apreciarlo de manera integral, y es algo tan necesario en los niños, que la mejor manera de mediar el aprendizaje en las edades tempranas es a través del juego, y para ello, el docente y los padres deben involucrarse en el juego, ser uno más dentro de éste, porque sólo así podrá guiar el aprendizaje asertivamente.
5. ¿Cómo se trabaja desde las aulas, las necesidades que presentan los niños en el campo neurológico?
El niño es un ser activo, él es el que aprende, el que se interroga, el que crea hipótesis. Al tener claridad en esto y conocer a cada uno de mis alumnos, puedo establecerme objetivos claros y saber que ayudas o experiencias les son necesarias. Es importante partir siempre de lo que él sabe y de lo que él tiene, porque este saber, tener y ser, serán lo medios para alcanzar lo que se aspira. Conocer a cada uno de mis alumnos, sus comportamientos y/o conductas, me permite emplear los métodos apropiados en el proceso de enseñanza/aprendizaje.
6. ¿Qué adelantos de la neurología, son de uso frecuente en la educación?
Muchos. Los adelantos e investigaciones que nos ofrece la Neurociencia sobre el funcionamiento del cerebro, nos ha permitido entender los comportamientos, motivación, atención, sentimientos y las funciones mentales superiores: aprendizaje, memoria y lenguaje. En Educación, gracias a estos conocimientos, es posible planear objetivos y proponer una serie de actividades para los cuales los niños están preparados y ofrecerlos en el momento apropiado.
7. ¿Es posible que el proceso de aprendizaje de un niño se afecte, cuando el docente desconoce que el desarrollo evolutivo va de la mano de la práctica pedagógica?
Si, porque un maestro debe conocer cómo se aprende, cómo es el desarrollo del ser humano, el entorno donde ha vivido ese niño, para entenderlo y/o comprenderlo, porque solo así podrá ofrecerle lo que necesita, de lo contrario, iniciaría una práctica cuyas exigencias no estarían acordes con ellos y obstaculizaría la motivación a aprender y posiblemente surgiría el sentimiento de no sentirse capaz de realizar la actividad propuesta. Por esto, cada vez estoy más convencida, que el proceso de enseñanza/aprendizaje lleva un componente afectivo, un saber quién eres, cómo te desarrollas como ser humano, y no basta sólo saber de memoria unas letras, números o las capitales de los diferentes países, sino que es una interacción donde me siento bien conmigo mismo y plenamente realizado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario